jueves, 14 de enero de 2016

Mi propio periódico.

Haremos que no escucho una ópera y que estoy en mi despacho de diputado recién nombrado a las siete de la mañana para emprender mi primer día de trabajo oficial, haciendo una propuesta para renovar la constitución y un nuevo proyecto para el programa de mi partido en el nuevo gobierno recientemente constituido..., soy por fin rey-presidente-senador-congresista y tengo por fin un magnífico sueldo, pero voy en bicicleta y no me afeito ni me lavo y llevo ropa de andar por casa. Para eso soy todo lo que soy. Y tengo una tablet porque soy una persona que vive en su tiempo y disfruta de los privilegios de haber nacido en un país libre, con internet y agua potable que sale del grifo. Ya he tomado todas las vitaminas y la moringa y la chía para funcionar como un funcionario funcional. 

Estoy sembrado. Analizo el primer paso que di al "jurar-prometer-chafardear" mi cargo ante las cámaras y me resulta un poco indigesto, ya como primera impresión, que todos los demás reyes-presidentes-senadores-congresistas aprovechen su turno de juramento de cargo para soltar panfletos, porque lo que dicen los demás son panfletos. 


Yo soy particularmente especial: sordomudo madre parapléjica y llevo a mi bebé que tengo que amamantar en medio de todo este momentazo de mi vida, que es la única que importa. Soy el pueblo, el dirigentico y el rey y de ello dan fé los medios de comunicación que se abalanzan sobre mí en busca de la piedra filosofal que va a solucionar todo el hambre del mundo, la paz y la justicia mundial, porque también soy mis mundo, con ciento nueve quilos, sin maquillar y cincuentón, pero ándale. Y "una cosa te digo" que "segunel dijo" ya he escrito trescientas palabras.


Entonces es momento de tomar mi frugal desayuno que han pasado veinte minutos de trabajo y he avanzado mucho, pero que mucho. El tema territorial lo dejo para cuando haya hecho mis necesidades en un momento. Suenan laudes y mandolinas para anunciar que voy a tomar posesión de la presidencia de la Generalitat y del Gobern, hacerme cargo de lo que es menester que sea. 


Solemnidad y un toque de progre universitario va bien para sintonizar con la nación, ese ente que es tierra, mar y aire lleno de pobres desgraciados.


Al ser educado en una familia de funcionarios y haber recibido desde mi infancia la lección del tortazo y al rincón, aprendí latín y he decidido que me dirigiré en tan ilustre lengua para anunciar mi mandato. Es lengua culta como el inglés pero no quiero ser partidista nada más empezar. Y quien no lo entienda que lo aprenda. Voy a iniciar mi mandato con un acento claramente progresista. Actualizar la normativa, dictar leyes y formar gobierno. 


En lo referente a los que no tienen nada, que no pierdan la esperanza, y a los que todo lo manejan después de haber vaciado las arcas de mi nuevo estado, temblad. Y ya he llegado a quinientas palabras, y quiero ser breve y bueno, dos veces bueno.


Por lo pronto me escandalizo de no haber recibido no sólo el apoyo de todos los demás sino de la noticia de portada en la que mi bebé enganchado a mi mama sea la portada de la prensa mundial. Lo de sentenciar a los corruptos y asesinos me acompaña en esta primera plana de mi primer día de mandato.


He nombrado a uno calvo que lleva asuntos exteriores para canalizar el tema de terrorismo y asuntos de agenda con otros colegas mandatarios porque, en persona, reconozco que -aunque me parezco a jesucristo con flequillo- mi sastre no da para más brazos.


Me he quejado "formalmente" a los medios de el escándalo que es la manipulación de poder que ha tenido el desmán el gobierno saliente al ejercer su derecho a voto en blanco para mi desprestigio y la anulación de los acuerdos tripartitos a los que me había comprometido para ser guay y que lo mío fuera lo más.


Pero..., hay cosas que la naturaleza no perdona. Doy por finalizada la jornada, ahora queda mucho por hacer y deshacer en el contubernio y la intimidad de mi celda. Soy preso de mi persona y ello conlleva atender mis naturales y reales ganas de ir a hacer de vientre. Con mi venia se pospone la sesión hasta que me de la real gana. Cojones que ya he escrito casi setecientas cincuenta palabras.


Alea lacta Est.